La soya, variedades de Brasil y Vietnam se estudian en el IDIAP
El Instituto de Investigación Agropecuaria de Panamá, (IDIAP) en constante diversificación de actividades en beneficio del productor nacional, lleva a cabo un proyecto de Soya, bajo la dirección del Dr. Arnulfo Gutiérrez G. en diferentes regiones del país a saber: Chiriquí, Tonosí, El Ejido, en Los Santos, el INA, Río Hato, Buena Vista, Colón y Chepo. El germoplasma de Soya llegó a Panamá, mediante un convenio con EMBRAPA, Empresa Brazileña de Pesquiza Agropecuaria, que desarrolló el diagnóstico completo de calidad de la semilla, procedimiento que involucró el control de seguridad en todas las etapas del proceso de producción, metodología que también le fue aplicada a las variedades que vinieron de Vietnam.
En cada una de las provincias donde se está desarrollando el Proyecto Soya, que dirige el Dr. Gutiérrez, se ha podido comprobar variaciones en crecimiento y grado de germinación en parcelas que identifican ambas variedades. Con el establecimiento de parcelas demostrativas e identificadas se ha logrado determinar los cultivos por rotación estacional, toda vez que éstas leguminosas fijan el nitrógeno en los suelos agotados, tras otros cultivos intensivos, constatando así, el grado de evolución de las semillas, su adaptación y rendimiento en las diferentes regiones.
Luego de las cosechas fue posible determinar algunas características propias de ambas variedades; entre ellas, el crecimiento que oscila entre 20 cms. hasta (1) un metro de altura. Las vainas, tallos y hojas están cubiertas por finos pelos de color marrón ó gris; y los frutos se presentan como una vaina pilosa creciendo en grupos de 3 a 5 semillas cuya cáscara es de color negro, marrón ó amarillo. Las hojas son trifoliadas y tienen 4 prospectos por hoja, con longitud de 8 a 16 cms. y 7 cms. de ancho. Es característico de ambas variedades que las hojas caen antes de que las semillas estén maduras; y las flores grandes, de color blanco o lila, inconspícuas, auto fértiles nacen en la axila de la hoja.
Para llegar a estas conclusiones, no finalistas aun, se realizaron estudios de irrigación y disponibilidad de drenajes de acuerdo a los suelos; uso de abonos orgánicos y técnicas para evitar pérdidas al momento de la cosecha, siguiendo instrucciones del Dr. Gutiérrez quien gerencia este proyecto.
Las comparaciones de los resultados por áreas sembradas, permitirá establecer el grado de adaptabilidad al suelo y la producción de ambas variedades de alta calidad nutricional, hará posible una variante en la alimentación; esto representa además un mejor balance socioeconómico, de acuerdo al impacto que tendrá su uso en las comunidades. De la «Carne de los campos» como también se le conoce a la Soya, se obtienen derivados como el Tofú, excelente alimento para personas intolerantes a la lactosa o alérgicas a la proteína láctea, también aporta los 8 aminoácidos esenciales, aunque la metionina sea escasa, se puede compensar incluyendo cereales, huevos o lácteos en la alimentación diaria.
La Soya representa una alternativa al consumo de la carne por su aporte proteico y su contenido en potasio, contrarresta el sodio, por lo que se recomienda en dietas para retención de líquidos.